José Lozano Gómez

La vocación por el barro policromadas tiene en José Lozano uno de sus más devotos admiradores, tres metros cuadrados, hurtados a su hogar, con una luz cegadora y un impresionante paisaje frente a las sierras de Alfacar y la Alfaguara, constituyen su "estudio-terraza" donde modela, sueña, trabaja y se divierte este artesano que encontró en plena niñez el placer de modelar la arcilla. A los doce años y tras haber pasado por la Escuela-Taller de Colegio Bermúdez de Castro, ya trabajaba con el que fuera gran barrista Jiménez Rada y posteriormente junto a su hija Josefa Jiménez Mariscal. Asiste a la Escuela de Artes y Oficios donde recibe clases de pintura, dibujo y modelado.

En la actualidad dedica sus ratos de ocio a la creación de figuras de belén y a su decorado, con un estilo propio en modelado y acabado que hacen de su obra original un valioso tesoro para todos los amantes de la obra bien hecha.